Una o varias vacas. Y el cine.

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Una o varias vacas. Y el cine.

Carta de candidatura a las Becas Doc’s Kingdom 2013 – Beca Manuel Cintra Ferreira

Lo que he guardado no se si es lo que vi o solamente lo que he querido recordar. El director entra en cuadro. Blanco y negro. Hasta ahora he visto que era un campesino. En esta ocasión no se trata de un cineasta que se desplaza al rural para retratar el mundo perdido. Tampoco persigue filmar la autenticidad. Y ése lugar es su hogar.

Vemos una vaca. Me parece que ella mira a la cámara, o le mira a él. ¿Era una sola? ¿O eran varias vacas? Ése hombre campesino-cineasta entra en el cuadro por la izquierda. Quiero recordar que deja sola su cámara, que se trata de un momento íntimo. Se aproxima, tranquilo, sosegadamente. Aquella vaca permanece ahí, de la misma manera que lo hacía antes de que el hombre se acercara a ella.

Él la abraza.

El, un cineasta-campesino. Ella, una vaca. Nosotros podemos mirarlos en la pantalla. Alumbramiento. Cambio de perspectiva. En su película Secteur 545, Pierre Creton nos enseña con un solo plano y un solo desplazamiento, ese modo suyo absolutamente singular de ser cinematográficamente las dos cosas. Alimento para nuestro deseo de cine, es más, diría incluso, para nuestro deseo de un “cine singular”.

Era junio del año 2007, Serpa. Los limones pesaban brillantes sobre los árboles. Las viejas piedras del acueducto frente a la diminuta sede del partido comunista también se volvían rojas al caer la tarde. Nosotros también bebíamos botellines de cerveza. Éramos un grupo de estudiantes que nos desplazamos juntos con nuestros precarios medios y nuestros profundos deseos de conocer aquello de lo que nos habían hablado: un espacio colectivo e intergeneracional de aprendizaje y reflexión sobre el cine documental en un pequeño pueblo del sur de Portugal. Cine y discusiones intensas desde el amanecer hasta ponerse el sol. Necesidad y placer.

Han pasado seis años desde aquella tarde en la que comprendí que un cineasta puede filmar una vaca abrazándose a ella. Desde entonces, no he vuelto a ver aquella película (ni ninguna otra) de Pierre Creton pero nunca lo he olvidado. En mi entorno de cultura urbana no hay posibilidad de repetir el gesto literal de ir por ahí abrazando vacas (¡afortunadamente para las vacas!), pero como aprendiz de cineasta, puedo decir que Pierre Creton me dejó una buena lección: para situarse, para tomar posición, cinematográficamente hablando, bastaría con realizar un justo movimiento.

Contenta de conocer la noticia del regreso de Doc’s Kingdom y deseosa de poder compartir esa “Idea de una isla”, ofrezco aportar cualesquiera de mis capacidades profesionales que puedan ser útiles para el seminario, ya se trate de labores relacionadas con las herramientas audiovisuales de corte más técnico (operadora de cámara y montadora – con equipo de vídeo y sonido propio – producción) así como labores de escritura (redacción de notas diarias, apuntes de las sesiones, diario de a bordo, traducción escrita de textos para las publicación de los cuadernos/libros del seminario, etc.) u otras actividades que sean precisas.

À bientôt j’espére,

pilar m.

Barcelona, 17 junio 2013.

NG]

One or More Cows. And cinema.

Application Letter for the Doc’s Kingdom 2013 Fellowships – Manuel Cintra Ferreira Fellow

What has remained in my mind, may be what I have seen or perhaps what I wanted to remember. The director steps into the frame. Black and white. So far, I have seen that he is a farmer. This time it’s not about a filmmaker moving around the countryside trying to capture a lost world. And he isn’t trying to shoot authenticity either. It’s his home.

We see a cow. I think she is looking at the camera, maybe she is looking at him. Was there only one cow? Was there maybe more than one? The man goes into the frame, entering from the left side. I want to remember that he leaves his camera aside, that it’s an intimate moment. He placidly approaches her, quite calmly. The cow stays there, just as she was before he got close her.

He hugs her.

He, a farmer-filmmaker. She, a cow. We can see them on the screen. Brightness. Change of perspective. In his film Secteur 545, by using just a frame and just a shift, Pierre Creton shows us this singular way of beeing both things: farmer and filmmaker. Fueling our desire for cinema; perhaps, more, our desire for singular cinema.

It was June 2007, Serpa. Shiny lemons weighing down the trees. The old stones in the aqueduct in front of the tiny communist party headquarters also turn reddish as evening fall. with the fall of the afternoon.We also drank small bottles of beer. We were a group of students travelling together with our precarious means and our deep desire to know that we were being talked about: a collective and intergenerational space for learning and thinking about documentary cinema in a little town in the south of Portugal. Cinema and intense discussions from daybreak until sunset. Both necessity and pleasure.

Six years later I understood that a filmmaker can shoot a cow and also hug her. Since then, I haven’t watched that film (or other films) directed by Pierre Creton but I have never forgotten it. In my urban surroundings there are no opportunities for litteraly repeating the gesture of going around “hugging cows” (luckily for the cows!), but as an apprentice filmmaker, I can say that Pierre Creton taught me a good lesson: in oder to position, or place oneself, when talking about cinema forms, it is enough to simply make the right movement.

I was very pleased to learn about the return of Doc’s Kingdom recently. We need it now more than never, there’s no doubt about that. As I would love have the possibility of sharing this new “Idea of an island”, I would like to offer you any of my professional skills that may be useful for the gathering, including more technical audiovisual skills (camera operator, editor, production – sound and video technical equipment also) or writing-related tasks such editorial, taking conferences notes, keeping diaries, translations for the publications or other activities that you may propose.

À bientôt j’espére,

pilar m.

hanks to nuria rodríguez]

Barcelona, 17/06/2013.